¿Cómo se emplea el aprendizaje basado en problemas o proyectos (PBL) en el desarrollo del pensamiento crítico y creativo?

¿Cómo se emplea el aprendizaje basado en problemas o proyectos (PBL) en el desarrollo del pensamiento crítico y creativo?

Antes  de responder la pregunta generadora anterior, mencionaré algunos puntos medulares relacionados al aprendizaje basado en problemas, de aquí en adelante (ABP), los cuales preliminarmente, marcarán la pauta para establcer la relación entre el ABP y el desarrollo del pensamiento crítico y creativo, a saber:

El aprendizaje basado en problemas es una metodología centrada en el aprendizaje, en la investigación y reflexión de los estudiantes hacia la búsqueda de posibles soluciones ante las problemáticas planteadas por el docente (Knowlton, D.S. & Sharp, D.C.  (2003).

El aprendizaje basado en problemas, se plantea como medio para que los estudiantes adquieran sus conocimientos y los apliquen para solucionar un problema real o ficticio, sin que el docente utilice la lección magistral u otro método para transmitir cada aspectos de los contenidos programáticos (Knowlton, D.S. & Sharp, D.C.  (2003).

Desde la perspectiva de Bas Peña (2011), la metodología ABP, permite desarrollar las siguientes competencias en los estudiantes:

• El desarrollo de actitudes y valores como la precisión la crítica y la tolerancia.
• las habilidades de comunicación como lo es la argumentación y presentación de hechos informativos,
• las competencias relacionadas en la toma de decisiones,
• las competencias relacionadas  en la resolución de problemas y finalmente,
• las competencias ligadas al trabajo colaborativo.

Con relación a lo anterior, Morral, Bou, Cabot, Capitán, Díaz, Fatjó & Romero (2002), añaden que el el ABP permite al estudiante asumir:

• Un mayor sentido de planificación y organización de las estrategias que se van a utilizar para aprender,
• un mayor control del aprendizaje autodirigido,
• aquellas habilidades de evaluación y autoevaluación,
• un mayor dentido de pensamiento crítico,
• puede garantizar el aprendizaje continuo y permanente.
• una mayor conciencia sobre el desarrollo de su propio aprendizaje,
• la identificación de problemas relevantes del contexto profesional en que se encuentre.

Como complemento a lo anterior, Exley y Dennick (2007) afirman que el ABP implica un aprendizaje activo, cooperativo, centrado en el estudiante, asociado con un aprendizaje autónomo y motivador. Es por ello, que los autores mencionan como características fundamentales del ABP las siguientes:

• Responde a una metodología centrada en el alumno, donde a través del trabajo autónomo y colaborativo, los estudiantes deben lograr los objetivos planteados dentro de los tiempos previstos,
• Requiere que los estudiantes trabajen en grupos pequeños (entre cinco y ocho) con el propósito de favorecer a los estudiantes a gestionar de manera eficaz los posibles conflictos que surjan durante el proceso y que además, puedan asumirlos con responsabilidad hacia consecución de los objetivos trazados (Exley y Dennick, 2007),
• Es mediante el sentido de responsabilidad asumida por todos los miembros del grupo, es que se logra garantizar la motivación por la compleción de las tareas y metas asumidas mientras se incrementa el sentido de compromiso real y fuerte por el propio aprendizaje del estudiante y por el de sus pares,
• Como parte de los beneficios del ABP, es que este favorece la posibilidad de interrelacionar distintas materias o disciplinas académicas,
• Además, el ABP puede utilizarse como una estrategia más dentro de la enseñanza y aprendizaje, aunque también es posible su aplicación en una asignatura en el desarrollo de un curso e incluso, puede integrarse como parte de las propuestas curricululares actuales (Exley y Dennick, 2007).

Ahora bien, tratando de responder la pregunta generado inicial: ¿cómo se emplea el aprendizaje basado en problemas o proyectos (PBL) en el desarrollo del pensamiento crítico y creativo?, los autores Knowlton & Sharp (2003), apuntan lo siguiente:

• El ABP contribuye con el desarrollo del pensamiento crítico y creativo en la medida que los estudiantes asumen la responsabilidad de resolver problemáticas, debiendo generar ideas sustentadas, las cuales requieren de una sólida argumentación donde interviene un cierto procesamiento donde intervienen las operaciones de pensamiento superior Knowlton & Sharp (2003),
• El ABP contribuye con el desarrollo del pensamiento creativo en los estudiantes como parte del desarrollo de los procesos requeridos para la resoluación de problemas y la toma de decisiones. Knowlton & Sharp (2003).
• Además, el pensamiento creativo se ve reforzado cuando los estudiantes deben recurrir a los procesos investigativos y de indagación, estableciendo mecanismos o referentes indispensables para la formulación de ideas, la deconstrucción y construcción de los conocimientos previos y la autenticidad.

Adicionalmente y a luz de Morales & Landa (2004),  el desarrollo de la metodología del ABP puede seguir algunos periodos determinados. A modo de ejemplo aquí se comentan dos aportaciones cuyas fases son algo distintas y que los autores Morales & Landa enumeran en ocho categorías distintas, a saber:

Fuente: Desarrollo del Proceso de ABP (Morales y Landa, 2004).

Finalmente, al utilizar metodologías centradas en el aprendizaje de los alumnos, los roles tradicionales tanto del profesor como del alumnado cambian. Es por ello, que se presenta a continuación, una descripción detalla de los papeles que ambos (docente/ estudiantes) interpretan dentro del ABP.

Rol del docente

Rol del estudiante

1. Da un papel protagonista al alumno en la construcción de su aprendizaje. 2. Tiene que ser consciente de los logros que consiguen sus alumnos. 3. Es un guía, un tutor, un facilitador del aprendizaje que acude a los alumnos cuando le necesitan y que les ofrece información cuando la necesitan. 4. El papel principal es ofrecer a los alumnos diversas oportunidades de aprendizaje. 5. Ayuda a sus alumnos a que piensen críticamente orientando sus reflexiones y formulando cuestiones importantes. 6. Realizar sesiones de tutoría con los alumnos.

1. Asumir su responsabilidad ante el aprendizaje. 2. Trabajar con diferentes grupos gestionando los posibles conflictos que surjan. 3. Tener una actitud receptiva hacia el intercambio de ideas con los compañeros. 4. Compartir información y aprender de los demás 5. Ser autónomo en el aprendizaje (buscar información, contrastarla, comprenderla, aplicarla, etc.) y saber pedir ayuda y orientación cuando lo necesite. 6. Disponer de las estrategias necesarias para planificar, controlar y evaluar los pasos que lleva a cabo en su aprendizaje.

Con el propósito de mejorar la comprensión de la temática ABP, el siguiente mapa conceptual reune los principales elemenos que lo conforman, a saber:

Fuente: Desarrollo del Proceso de ABP (Morales y Landa, 2004).

Referencias:

Bas Peña, E. (2011). Aprendizaje basado en problemas. Cuadernos de pedagogía, (409), 42-44.

Exley, K., & Dennick, R. (2007). Enseñanza en pequeños grupos en educación superior: tutorías, seminarios y otros agrupamientos. Narcea Ediciones.

Morales, P., y Landa, V., (2004). Aprendizaje basado en problemas.  Theoria,Vol. 13. núm. 1.  pp. 145-157. Disponible en: http://campus.usal.es/~ofeees/NUEVAS_METODOLOGIAS/ABP/13.pdf

Morral, A., Bou, T., Cabot, A., Capitán, A., Díaz, J., Fatjó, J. & Romero, D. (2002). Aprendizaje basado en problemas.

Knowlton, D.S. & Sharp, D.C.  (2003). Problem-based learning in the information age. pp. 5-44 y 81-87. San Francisco: Jossey-Bass. Traducido al español.